El Consejo de Ministros aprobará el próximo viernes el anteproyecto de ley con la reforma fiscal que el Gobierno viene gestando durante los últimos meses. A mediados de julio el Consejo aprobará el proyecto de ley y en septiembre se tramitará en el Congreso de los Diputados. Las medidas entrarán en vigor a lo largo de los próximos dos años. ¿Pero qué medidas se van a aprobar el próximo viernes?
Limitación del sistema de módulos para autónomos
Hacienda pretende quitar este régimen a los autónomos salvo a aquellos que trabajen directamente de cara al público como peluqueros, taxistas u hosteleros. De esta forma, lo que vendan directamente a empresas perderán este sistema de tributación que se basa en el consumo energético del negocio, el número de trabajadores contratados o el número de metros cuadrados del local.
Uno de los principales motivos para acabar con este sistema es que esta forma de tributar es propenso a que se comentan fraudes y se emitan facturas falsas. El sistema dejará fuera a unos 300.000 autónomos, casi la mitad de los que tributan por este sistema.
Reducción de las retenciones a profesionales
En el año 2012 el Ejecutivo decidió subir del 15% al 21% las retenciones para autónomos. Aunque en un primer momento la medida solo estaba contemplada para el año ese y para el posterior (2013), el porcentaje se ha mantenido hasta 2014. Ahora, la reforma fiscal baraja la opción de volver a bajar la retención a los autónomos hasta el 19%.
Asimismo, también está previsto establecer porcentajes más bajos para los autónomos que ingresen menos. De esta forma, las rentas más bajas tributarían entre el 15% y el 17% de los ingresos.
Bajada del IRPF y del impuesto de sociedades
La bajada del IRPF es el punto estrella de la reforma fiscal. La intención de Hacienda es contrarrestar el aumento que se produjo en 2012 con un descenso que beneficie sobre todo a las rentas más bajas (representan a un 40% de los contribuyentes). El nuevo sistema de IRPF aspira a tener un máximo de cinco tramos y a parecerse a los modelos fiscales más avanzados de Europa.
En cuanto al impuesto de sociedades, en España alcanza un 30%, uno de los más altos del continente. Aunque todavía no se ha concretado de cuánto podría ser la reducción del gravamen, todo apunta a que bajará a un 25% con la posibilidad de que llegue hasta el 20% progresivamente.
Si te surgen dudas sobre cómo te afectará la reforma fiscal a ti o a tu negocio, consulta a un gestor administrativo especializado.
